Hola amigos, hoy les traigo este género que lo conforman alrededor de 30 especies, generalmente epífitas, a veces terrestres y ocasionalmente litófitas.
Se distribuyen a lo largo de Centro y Sudamérica, creciendo en bosques húmedos, con elevaciones de l,000 a 2,800 msnm., donde las temperaturas son intermedias a frescas. Crecen en las partes bajas de los árboles por lo que no requieren de mucha iluminación para florecer. Si están en crecimiento, dando brotes, hay que regarlas profusamente; pero disminuir la cantidad de riego cuando entran en reposo, lo cual sucede generalmente cuando termina la floración o a principios del invierno. De cualquier manera, tener en cuenta que no le gusta permanecer seca por mucho tiempo.
Se las puede cultivar sembradas en una maceta de terracota con agujeros, con sustrato para epífitas que incluyan osmunda o corteza de pino, carbón, musgo y algo de piedritas.
Abonarlas en crecimiento cada 15 días, nunca en reposo ni cuando están enfermas. Florecerá bien entrado el invierno. Sus hermosas flores, además de aromáticas, son muy duraderas.
La foto pertenece a la especie Juninensis, la cual es oriunda de mi país y del Ecuador; crece en elevaciones de 1,000 a 1,800 msnm.
Trichopilia Juninensis
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